Por José Gilberto Valdés
josegvaldés@gmail.com
El 24 de febrero es una fecha significativa en la historia de Cuba. En l895, José Martí reinició la guerra necesaria para alcanzar la ansiada independencia de España, la cual se vio frustrada tres años después por la intervención de la mano peluda del naciente imperialismo yanqui en el conflicto armado.
Hoy, a 117 años, aquella convocatoria emancipadora de Martí es fuente de inspiración en la fortaleza de la nación cubana, ahora frente a otro adversario: los Estados Unidos de América que han considerado a la Isla como parte especial en su voluntad de engrandecimiento geopolítico desde finales del siglo XVIII.
El “síndrome de la fruta madura” no se ha desligado en modo alguno de las relaciones deshonestas de los vecinos del Norte, y ha sido replicado durante cincuenta años en el criminal bloqueo económico, comercial y financiero, que impacta masiva, sistemática y flagrantemente en la vida cotidiana de cada cubano.
Vale la pena exponer que en el presente año, más de la mitad de los gastos previstos por el presupuesto estatal corresponden a la salud, educación y otros aspectos que favorecen a la calidad de vida y el bienestar social de los habitantes de la Isla.
¿Se corresponde este procedimiento gubernamental con los derechos humanos? Cierto, pero todo hay que hacerlo contra viento y marea, enfrentando a voces de gobernantes reaccionarios, temerosos del ejemplo, y a cierto periodismo bien renumerado por pulgada de mentira, pues no importa lo que fantasee, siempre que las frases sean apreciadas por quienes firman los cheques.
El Estado cubano no escatima en los gastos para garantizar gratuitamente los servicios de salud a cada ciudadano, sin distinción de raza, credo político o religioso, pero muchas veces se encarecen más de lo necesario los trámites para adquirir un equipamiento de alta tecnología o comprar un producto de compleja fórmula farmacéutica. ¿Por qué cierta “prensa libre” calla esa realidad que atenta contra la vida de personas de todas las edades?
El Gobierno Revolucionario siembra escuelas en los lugares más remotos del país para brindar el pan de la enseñanza, sin costo alguno para el bolsillo de la familia cubana, desde el preescolar hasta la universidad. Sin embargo, hay que vencer muchos absurdos obstáculos para asegurar el abastecimiento de materiales básicos para el aprendizaje de los estudiantes. ¿Cuáles son los grandes medios de comunicación que difunden esta problemática del pueblo de la Mayor de las Antillas?
Desde febrero de 1962 cuando se declaró el bloqueo, no ha podido doblegarnos el gigante de las siete leguas, un supuesto defensor de los derechos humanos, que pretende impedir que los cubanos defendamos nuestro proyecto social de todos y para el bien de todos.
¿Sabrán ciertos gobernantes y sus lacayos de la prensa que el bloqueo de los Estados Unidos de América contra Cuba es una violación del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos?
De todas formas recuerdo su texto en las conclusiones de este comentario:
Artículo 1.1: “Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural”.
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