Recurrente para los hombres y mujeres de la provincia de
Camagüey es la sentencia “con la vergüenza”, cada vez que enfrentan un contratiempo
en el quehacer cotidiano.
La frase tiene origen histórico, en momentos decisivos al
inicio de la guerra independentista (1868 – 1878), cuando Ignacio
Agramonte Loynaz discute con un oficial inseguro por el futuro de la contienda:
¿No está viendo usted lo contrario todos los días? ¿Con qué recursos
cuenta usted, General, para continuar la guerra?
Agramonte no demora su respuesta. Dice, rápido:
—Con la vergüenza.