Por José Gilberto Valdés
El escritor norteamericano Ernest Hemingway se retorcería en
su sepulcro. Su antológico libro “Adiós a las armas” (1929), toda una imagen de
la voluntad humana, el miedo a la guerra y el amor, ha sido, literalmente,
baleado por un Colt 45, es decir, por el presidente cuadragésimo quinto de los
Estados Unidos. Donald Trump aboga resueltamente por el desenfreno armamentista,
fuera y dentro del país.
En la Casa Blanca el gobernante promueve la estrategia para
el aumento de la exportación de armas fabricadas en los Estados Unidos, con el supuesto
objetivo de proporcionar a los aliados
la posibilidad de compartir el peso de la seguridad internacional.
A la vista de todos es
un negocio: A los productores les parece poco que durante el año 2017 el valor
de las ventas superó los 41 mil 930
millones de dólares, un crecimiento de 25 por ciento en relación con el año
anterior, según información de Prensa Latina.
Es muy fuerte el compromiso de Trump, quien amasó sus
millones en acciones inmobiliarias, pero estableció sólidos vínculos con la
Asociación Nacional del Rifle –creada en 1871--, que apoyó la candidatura con
dinero, mucho dinero si tenemos en cuenta que eran alrededor de 30 millones de
dólares, para que ganara las elecciones a su rival Hillary Clinton.
Por esta razón, el “señor 45” es capaz de destacar a los
señores de las armas como grandes personas y patriotas:
Lo que mucha gente no entiende, o
no quiere entender, es que Wayne, Chris y la gente que trabaja tan duro en la
@NRA son Grandes Personas y Grandes Patriotas Estadounidenses", tuiteó
Trump en referencia al presidente de la NRA, Wayne LaPierre, y el estratega
jefe de esa organización, Chris Cox.
Sin embargo, las ventas de armas también han creado un gran
conflicto doméstico a consecuencia de los tiroteos en escuelas, lugares
públicos, instituciones…Uno de los más recientes y violentos fue en una escuela
en La Florida, donde un joven tirador empleó un fusil automático de combate AR
15 para asesinar a 17 personas.
Hasta ese lamentable acontecimiento se registraba un tiroteo
cada 60 horas en los primeros meses de 2018, más del doble que en cualquiera de
los tres años anteriores en el mismo periodo. Los sobrevivientes del segundo
tiroteo más mortal en la historia de Estados Unidos, han activado un polémico debate
nacional para el control de armas, que protege la Segunda Enmienda de la
Constitución de Estados Unidos.
Según traducción de CNN, el texto en español sería el
siguiente «Siendo necesaria una milicia bien ordenada para la seguridad de un
Estado Libre, no se violará el derecho del pueblo a poseer y portar armas».
Lo curioso es que la referida enmienda es originaria del
siglo XVIII.
Sobre la zozobra de las armas como fenómeno doméstico de los
Estados Unidos, repaso la obra del documentalista Michael Moore, «un hombre
inteligente, hábil y con clara visión de lo que son las cosas y de cómo
deberían ser». http://www.centrocp.com/michael-moore-retrato-a-los-ee-uu/
Los calificativos
pretenden ser antídoto a las denuncias en torno a la naturaleza de la violencia
local. El dedo en la llaga fue el audiovisual sobre la masacre del año 1999 en
el instituto Columbine.
La prolífera producción de Moore en torno al tema de la
Segunda Enmienda tiene uno de sus puntos de giro, según mi opinión, es el
documental Una Historia Breve de los EE.UU https://youtu.be/UQLeDArhhos
Pese a las críticas el “hombre fuerte” de la Casa Blanca
persiste “en el derecho a la portación de armas”. A principios del mes de mayo,
asiste junto miles de simpatizantes a
una feria de armamentos organizada por la Asociación Nacional del Rifle en
Dallas (Texas).
El mandatario norteamericano ratifica en este nuevo
escenario que la Segunda Enmienda "jamás estará bajo asedio mientras yo
sea su presidente", según reporte del diario argentino El Clarín.
"Nunca renunciaremos a nuestra libertad. Viviremos
libres y moriremos libres", dijo Trump y al mismo tiempo exhortaba a los
ciudadanos que defienden el derecho a la portación de armas que voten por los
republicanos en las elecciones legislativas de este año. "Tenemos que
ganar en 2018", añadió.
¡Bienvenidas las armas!: habrá más votos.
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