Cada cubano y cubana tiene muchas razones en la posición persistente en la Asamblea General de la ONU para defendernos del sucesivo ultraje del gobierno de los Estados Unidos. Los señores que manipulan la administración norteamericana son tercos a la enésima potencia cuando mantienen vigente el obsoleto bloqueo económico, financiero y comercial que mantiene desde hace casi 60 años.
Hoy primero de noviembre del 2017 vuelve a ser un gran día en la lucha diplomática de la Mayor de las Antillas contra ese engendro de la política estadounidense contra un pueblo latinoamericano.
El Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parilla, ya se encuentra en Nueva York para la presentación y votación del proyecto de resolución titulado “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.
Los daños ocasionados por esa política genocida ascienden hasta la fecha a 822 mil 280 millones de dólares, tomando en cuenta la depreciación de esa moneda frente al valor del oro en el mercado internacional.
Cierto es que la votación del año anterior en la sede de las Naciones Unidas fue excepcional. Allí la resolución cubana recibió 191 votos a favor. EE.UU. y, por supuesto, Israel se abstuvieron, luego de una repetida votación contraria durante 24 años seguidos. Sin dudas, influyó en este acontecimiento la actitud asumida por el entonces Presidente Obama en las relaciones con Cuba.
Sin embargo, el muro es un cuerpo legislativo que regula una serie de sanciones contra Cuba. En esencia, no hubo cambio en nuestro país para la escasez de recursos y materias primas, las puertas cerradas, el No en naciones que debería ser SI para mostrar soberanía, la ingeniosidad en búsqueda de grietas… En fin la lucha por la supervivencia en todas las esferas de la vida de cada habitante de la Isla.
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Los ojos del mundo volverán a estar hoy fijos en la pizarra electrónica de votación en el hemiciclo de la Asamblea General de la ONU. Hay expectativas en torno a la polémica influencia de los últimos meses de Donald Trump, el cuadragésimo quinto presidente de los EE.UU., quien ha anunciado y ejecutado cambios en las relaciones con Cuba, como parte de una compleja y agresiva política internacional.
Estados Unidos votará en contra de una resolución de la Asamblea General de la ONU el miércoles que solicita levantar el bloqueo de Washington contra Cuba, dijo el martes el Departamento de Estado, lo que cambia la abstención del año pasado.Sin embargo, cuando faltan pocas horas para la votación crecen las manifestaciones de apoyo y solidaridad de los pueblos, organizaciones internacionales y gobiernos con Cuba.
En el 72 Período de Sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas triunfará nuevamente la persistencia del pueblo cubano. A que sí.
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