Resulta difícil superar las cifras de cantidad de votaciones a favor el informe “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”. Lo que no podemos dudar es que serán favorables, como las 18 veces consecutivas anteriores.
Por José Gilberto Valdés
valdes@tvcamaguey.icrt.cu
¿Esperar o no? Puedo parafrasear el célebre soliloquio del Hamlet, de Shakespeare, mientras aguardo por la alentadora noticia desde el plenarium de la Organización de Naciones Unidas.
Nada me puede sorprender. Los últimos años el respaldo mundial a las denuncia de Cuba al bloqueo genocida de los Estados Unidos se ha expresado por más de 180 representaciones. El año pasado la cifra se elevó a 187 votaciones a favor del pueblo cubano. El imperio yanqui solo ha sido acompañado por tres o cuatro acólitos.
¿Qué esperar? En las últimas semanas, gobiernos y organizaciones no gubernamentales han reiterado el reconocimiento de que es injustificable este proyecto criminal contra el desarrollo económico y social de la isla caribeña.
Los intentos de asfixiar al pueblo cubano son manipulados por los Estados Unidos con el eufemístico: embargo, con el fin de engañar la opinión mundial. No obstante, el rigor con se aplican las medidas para hacernos claudicar en la decisión de ser soberanos, va mucho más del significado de esa palabra para ser, sin dudas: bloqueo. Desde la Conferencia Naval de Londres, de 1909, es un principio aceptado en el derecho internacional que: el bloqueo es un acto de guerra, y siendo así, sólo es posible su empleo entre los beligerantes.
Así, como se ha difundido ampliamente, 7 de cada 10 cubanos, de una población de poco más de 11 millones de habitantes, nacieron y crecieron bajo los efectos del bloqueo norteamericano, que se aplica unilateralmente desde febrero de 1962.
Resulta difícil superar las cifras de cantidad de votaciones a favor el informe “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”. Lo que no podemos dudar es que serán favorables, como las 18 veces consecutivas anteriores.
¿Esperar o no?. That is the question?
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